domingo, 1 de marzo de 2009

Anhelos de libertad


Demos libertad a nuestras mariposas,
dejémoslas bailar a su antojo.

Abramos las fronteras de nuestro jardín privado,
y miremos al horizonte buscando el color de tus ojos.

Sembremos nuestros cuerpos en el campo de los sueños,
y dejemos que arraigue nuestro amor bajo un olivo.

Seamos tierra, agua, sol, que oyen crecer la hierba,
tierra húmeda que recibe la lluvia de la ilusión,
el calor del deseo.

Hagamos una escapada en secreto.

Nadie sabrá que fuimos nosotros
quienes comenzaron los incendios este verano,
con el fuego de la pasión bajo una encina.

3 comentarios:

QUEMANIA dijo...

¿Un fuego bajo las encinas?

Pues igual te vemos en la tele je je...

Juan Carlos dijo...

Pues estaría bueno... siendo concejal de medio ambiente....

Nerina Thomas dijo...

Bello poema. El fuego vuestro que camina por las venas. Felicitaciones!!